No toda crisis de pareja discurre de la mejor manera posible y en muchas ocasiones aflora la violencia verbal y física entre personas que antes habían tenido un trato afectuoso.
En la mayoría de las ocasiones los procedimientos penales se inician tras una denuncia previa, pero cualquiera ajeno a la relación puede también poner los hechos en conocimiento de las autoridades, incluso de forma anónima, con una simple llamada telefónica.